La maldición de Woodstock vuelve a atacar. El 18 de septiembre, SGC Entertainment de Corea del Sur anunció en su sitio web oficial que la Feria de Arte y Música de Woodstock 2023 había sido cancelada “debido a circunstancias relacionadas con el organizador”, según Korea JoongAng Daily.
El festival de tres días, el primero en llevar el visto bueno de Woodstock fuera de Estados Unidos, estaba originalmente programado para julio, pero el mes pasado se pospuso hasta octubre “para garantizar una operación segura y trabajar en la finalización del evento”. En ese momento, SGC insistió en que el evento estaba “siendo pospuesto, no cancelado”.
Casi todos los artistas anunciados para el festival eran coreanos, aunque hubo rumores de que podrían participar invitados internacionales. Esta es la segunda vez que se cancela un festival con la marca Woodstock en Corea. Se suponía que el primero ocurriría en 2010.
La edición abortada de este año enfrentó problemas desde el principio. JoongAng Daily dice que inicialmente “los fans criticaron la decisión de reutilizar el nombre Woodstock” debido a las controversias en torno a los festivales posteriores en los EE. UU. en 1994, 1999 y 2019.
También expresaron dudas sobre el lugar original anunciado para el evento en el río Hantan, que dijeron que “carecía de la infraestructura adecuada”. Además, el cartel había cambiado con tanta frecuencia que nadie sabía realmente quién iba a actuar, y los precios originales de las entradas eran tan altos (300 dólares para el fin de semana) que parecía que no se podían vender.
