PAGAN $3.9 MILLONES POR GUITARRA DE VAN HALEN
La icónica guitarra “FRANKENSTRAT” que Eddie Van Halen tocó tanto en el escenario como en el video clásico de “Hot for Teacher” de Van Halen se vendió en una subasta esta semana por la friolera de $3.9 millones.
La subasta de Sotheby’s también incluyó otros objetos efímeros del famoso video de 1984, incluida la camisa de fuerza y los guantes blancos que usó EVH en la imagen, pero el atractivo principal fue la Stratocaster hecha a medida con la pintura inspirada en De Stilj, la marca registrada de Van Halen. La guitarra superó la estimación previa a la subasta de entre $ 2 y 3 millones.
El artículo también vino con una carta de procedencia de Paul "Unk" Unkert de Kramer Guitars, quien fabricó esta guitarra a medida según las exigentes especificaciones de Van Halen a fines de 1982. "La [guitarra] Van Halen 'Hot For Teacher' fue construida por mí en la planta Kramer Green Grove Road en Neptune, NJ alrededor de 1982-1985/ #CO176. Busque los sellos "Unk" en el cuello y el cuerpo. Fue mi último proyecto para Ed y Kramer”, escribe Unkert en la nota.
Después de servir como el instrumento principal de Eddie Van Halen durante algunos años, la guitarra fue regalada al técnico de batería de la banda que se retiraba en 1990, quien a su vez se la dio a su sobrino, quien la vendió a la tienda Neal's Music de Huntington Beach, California, quien la subastó a través de Sotheby's a un postor ganador aún desconocido.
Si bien la venta estableció un récord para la Frankenstrat más cara vendida en una subasta (el difunto guitarrista tenía un arsenal del amado modelo en su colección, algunas de las cuales ya se han vendido), la venta no alcanzó las guitarras históricas de la subasta propiedad de Kurt Cobain, cuya acústica MTV Unplugged se vendió por $6 millones y la guitarra "Smells Like Teen Spirit" se vendió por $4.5 millones.
Los $3,932,000 que obtuvo la convierte en la cuarta guitarra más cara jamás vendida, solo $43,000 detrás de los $3,975,000 obtenidos por la legendaria Black Strat de David Gilmour en 2019.
