El cofundador de Pink Floyd, Roger Waters, inició un proceso legal por los conciertos cancelados propuestos en Frankfurt y Munich este verano.
El extrovertido rockero de 79 años debía tocar en el Olympiahalle de Munich el 21 de mayo y en el Festhalle de Frankfurt el 28 de mayo como parte de su primera gira de despedida This Is Not A Drill, sin embargo, ambos espectáculos fueron cancelados el mes pasado debido a las opiniones de Waters.
Al explicar su decisión de cancelar el show de Festhalle, el Ayuntamiento de Frankfurt dijo: "El trasfondo de la cancelación es el persistente comportamiento antiisraelí del exlíder de Pink Floyd, considerado uno de los antisemitas más difundidos en el mundo".
"Llamó en repetidas ocasiones a un boicot cultural a Israel, hizo comparaciones con el régimen del apartheid en Sudáfrica y presionó a los artistas para que cancelaran eventos en Israel".
La decisión del consejo de cancelar el concierto fue aprobada por el Magistrado de la ciudad de Frankfurt el 24 de febrero.
Cuatro días después, el Ayuntamiento de Múnich canceló el Olympiahalle de Waters y argumentó que el rockero "sigue suscitando resentimiento antisemita" y difunde "ideologías de conspiración que justifican la brutal guerra de agresión de Rusia contra Ucrania".
En un comunicado emitido a Planet Rock (16 de marzo) bajo el título 'Roger Waters contraataca', Mark Fenwick Management ha confirmado que Waters está tomando acciones legales por las cancelaciones en Frankfurt y Munich.
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